Ya llevaba tiempo queriendo experimentar algo sobrenatural, quizás diferente, raro o fuera de lo común, según como lo veas en esta aburrida rutina en la que se convierte nuestro día a día… en mi caso, voy de la casa al trabajo y viceversa, con muy poca vida social y demás momentos para desahogarme, cuestión que provoca que todo ese malestar se acumulé hasta querer estallar como paso recientemente y es lo que les vengo a comentar hoy.

¿Qué es el LSD?

El LSD es una droga semisintética que provoca efectos alucinógenos en quien la consume. El LSD (dietilamida de ácido lisérgico) adquirió popularidad durante las revoluciones contraculturales de los años 60 y 70 del siglo XX y también a través de la cultura popular, sobre todo en el cine y en la televisión.

Actualmente tiene el estatus de droga ilegal en gran parte del mundo pero se usa con fines medicinales y de manera legal en algunos países. Sin embargo, el uso continuado del LSD puede provocar graves problemas mentales, por lo que es necesario conocer las características de esta droga.

El LSD se elabora a partir de una sustancia llamada ergotamina, que está presente en el cornezuelo, un hongo que habita distintos cereales aunque el más común es el centeno. Este hongo lleva utilizándose desde hace milenios como sustancia psicoactiva por distintas civilizaciones, en algunos casos sin saber de la existencia de la misma.

No existe evidencia empírica de que el LSD sea una droga adictiva, pero sí está demostrado que puede ocasionar graves problemas de salud en aquellas personas que lo consumen de manera habitual.

Pese a los graves efectos que puede tener el LSD en la salud, esta ha sido una droga usada de manera frecuente por artistas, cantantes o escritores para, según sus testimonios, alcanzar la inspiración. Personalidades del mundo de la música, la literatura, el cine o la tecnología como Steve Jobs, Cary Grant, los Beatles o Aldous Huxley han sido consumidores reconocidos de LSD.

El LSD se consume generalmente por vía oral. Por lo general se ingiere un soporte donde se administra una pequeña dosis de la droga, que normalmente suele ser una gota. Estos soportes acostumbran a ser láminas finas de papel, cartón, terrones de azúcar o gominolas.

Historia

El LSD fue descubierto por el químico suizo Albert Hoffman en 1943, mientras trabajaba en un laboratorio de Basilea para hallar una sustancia que favoreciera la circulación sanguínea. Hoffmann había estado investigando con el cornezuelo desde hacía 5 años, sintetizando la ergotamina, que es el principio activo que provoca los efectos de la droga. No fue hasta que decidió probar la sustancia por sí mismo que descubrió los efectos de la droga.

En 1947 fue comercializada por unos laboratorios la sustancia que Hoffmann había descubierto, con fines medicinales para tratar enfermedades como la esquizofrenia o el trastorno bipolar.

Efectos

Los efectos experimentados pueden ser muy variados. Podemos clasificar los efectos de esta droga en físicos, psicológicos y perceptivos.

1. Efectos físicos

Los síntomas físicos que puede experimentar alguien que consume LSD son la dilatación de las pupilas, el aumento de la frecuencia cardíaca, temblores, fiebre, niveles elevados de azúcar en el organismo, aumento de la aparición de movimientos reflejos, contracciones musculares e insomnio.

2. Efectos psicológicos

Los efectos psicológicos que caracterizan el consumo de LSD incluyen los siguientes: un desequilibrio emocional que puede ir desde la euforia hasta la tristeza; ansiedad; dificultad para pensar de manera coherente, o bien aumento de la capacidad reflexiva o creativa; problemas para llevar a cabo funciones cognitivas determinadas; aumento del afecto hacia personas cercanas o de la animadversión hacia otros.

3. Efectos perceptivos

Los efectos perceptivos o sensoriales que se experimentan al tomar LSD incluyen la percepción de colores muy vivos en los objetos o las personas, alucinaciones de todo tipo, percepción alterada del tiempo, sinestesia y experiencias especiales percibidas como religiosas o espirituales.

Experiencia

Tal y como les comentaba más arriba con los efectos que se han  comprobado con dicha droga alucinógena, me paso casi al pie de la letra.

Primero tuve que contactar por Internet con el “Deleer” o el vendedor se dicho producto, un tal “Ninja” el cual fue muy rápido y prácticamente me la hizo llegar hasta mi casa. No les miento que sentí miedo de lo que pudiera suceder, pero realmente fue sencillo, rápido y seguro, dicho personaje paso en su moto, saco el producto y se fue.

Eran aproximadamente las 9 de la noche cuando llegue a la casa y decidí darme una dosis el producto, lo que equivale a un pedazo de papel (una gota del químico), pensé que sería muy poco y no me daría ningún efecto notorio ¡que iluso! Pasadas unas horas empecé a sentir nauseas, los colores se resaltaban, se me subía la temperatura, empezaba a sentir cada parte de mi cuerpo y un sin fin de sensaciones que no tenían descripción, tanto que me retorcía en la cama de tantas sensaciones “satisfactorias” que sentía, incluso aproveche para colocar música psicodélica de fondo lo que fue algo de error, creería yo ¿por qué? Fue un efecto muy adverso de lo que esperaba… empezó a sonar el Álbum de Pink Floyd Dark side Of the Moon, todo se sentía tan bien hasta que empecé a sentir un vacío emocional, tanto que fue como caer al infierno… a pesar de algunas luces de mi casa estar encendidas ¡todo eran sombras!, sentía los pájaros cantar, alarmas, gritos y muchos terrroficos sonidos que ignore … hasta levantarme corriendo de la cama para cambiar de situación.

Posteriormente llegue al baño a echarme agua en la cabeza como si de una borrachera se tratase y así pudiera bajar un poco el malestar, pero no, antes empeoro más, las paredes se movían y se hacían cada vez más estrechas, también mis gatos parecían entrar en bucle moviéndose de un lado a otro en un solo lugar… creeme que da un poco de escalofrío, pero te controlas sabiendo que todo es producto tus pensamientos y por lo tanto tienes que regular lo que piensas. Recuerdo que me senté desconcertado en el baño y me quede mirando los gatos dando vueltas en un solo lugar, quizás esperando que en algún momento terminara, pero no, no aguantaba quedarme quieto en un solo lugar así que me levante lentamente a apagar la luz del baño cuando de repente sentí una cola de gato peluda por toda la mano, esto me coloco los pelos de puntas… y más escuchando gallos sonar de fondo ¡toda una locura!

Trate escribirle a amigos acerca de lo que sucedia y más para tratar de separar lo real de lo ficticio, pero nada de esto funciono ¡parecía ser dos! Yo escribía y alguien más eliminaba los mensajes … cada rato miraba la hora y esta parecía no cambiar, cuestión que desmenti colocando a rodar un cronómetro, este iba sin problemas, era mi mente quién pausaba el tiempo. Sentí tanto miedo de lo que pudiera hacer que quise buscar ayuda ¡todo eran bucles! Me levantaba y me despertaba en un situación diferente, siendo alguien diferente, olvidando el resto y repitiendo lo mismo, incluso perdiendo el control de lo que hacia.

Todo fue muy tétrico, tanto que pensé que me iba a quedar para siempre atrapado en mi propia mente, busque a mamá en su pieza y quise pedirle ayuda, pero no aguantaba la pena de decirle que había consumido dicha droga, todo lo camufle diciéndole que era una pesadilla que tenía… ahí fue donde pude separar lo real de lo ficticio porque ella me hacia entrar en si haciéndome preguntas, me decía “¿estás bien?” Y yo respondía en bucle “¿por qué?”, “¿que paso?”, “nada” y repetía varias veces lo mismo cambiando de lado y posición las palabras, todo muy loco… tanto que ella prefirió seguir durmiendo, a lo que decidí volver a cama para  no molestar más; esto me hizo recordar las películas de La naranja mecánica, Memento y otras de ese estilo, fue casi similar.

En fin. Resumiendo todo: me fui a dormir, seguí experimentando de todo un poco, no paraba de levantarme de la cama, caminar, pensar y volver a acostarme (tratando de controlar todo), finalmente se llegaron las 2 de la madrugada y todo finalizo ¡por suerte! Fueron 6 horas de efectos que NO miento, no me arrepiento, se sintió bien en su principio, pero se iba tornando cada vez más oscuro y loco, con esto me quedo y prefiero no volver a experimentar con dicha droga… si algún día experimentan haganlo bajo supervisión. Saludos

Referencias bibliográficas:

  • Halpern, J. H., Suzuki, J., Huertas, P. E. & Passie, T. (2014). Price, L. H. & Stolerman, I. P. (Eds.). Encyclopedia of Psychopharmacology A Springer Live Reference. Heidelberg, Germany: Springer-Verlag Berlin Heidelberg. pp. 1–5.
  • Mucke, H. A. (2016). From Psychiatry to Flower Power and Back Again: The Amazing Story of Lysergic Acid Diethylamide. Assay Drug Dev Technol., 14: 276–281.